¿Puedo comer nueces en el embarazo?

Por lo general, es totalmente seguro y recomendable incluir nueces en la dieta durante el embarazo. Las nueces son una excelente fuente de nutrientes esenciales para las madres y bebés en desarrollo, según el estudio publicado por la revista Nutrients en el año 2021.^[3]

Mucho se ha escrito sobre los beneficios de las nueces en la dieta de las mujeres embarazadas, sobre todo en el primer trimestre, por estar asociado con un mejor desarrollo neuropsicológico infantil a largo plazo, tal como lo menciona un estudio publicado en la Revista Europea de Epidemiología (2019).^[1]

También está asociado con un alto contenido de ácidos grasos esenciales poliinsaturados, y es por este motivo, que se debe consumir con regularidad para reducir el riesgo cardiovascular, el cáncer o los trastornos respiratorios, entre otros beneficiosos.^[2]

¿Cuántas nueces debes comer diariamente durante el embarazo?

No existe una cantidad específica de nueces que se deba consumir diariamente durante el embarazo, ya que puede variar dependiendo de las necesidades individuales de cada una. Sin embargo, se recomienda añadir unos 30 gramos a tu dieta diaria.

La FDA (agencia americana de Administración de Alimentos y Medicamentos), basándose en investigaciones no concluyentes, sugiere que comer 45 gramos de nueces al día ayuda a reducir el riesgo de enfermedad coronaria, siempre y cuando también se cumpla con una dieta baja en grasas saturadas, calorías y colesterol. También puede interesarte ¿Es bueno comer cacahuetes en el embarazo?

Los frutos secos son esenciales para el crecimiento y el desarrollo y una rica fuente de nutrientes. A continuación te mencionamos los principales beneficios para la salud de comer nueces durante el embarazo:

• Contienen ácidos grasos omega-3: las nueces son una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, cruciales para el desarrollo cerebral y visual del bebé. De cada 100 gramos de nueces sin cáscara, aproximadamente 65 a 67 gramos son grasas, de las cuales entre 45 y 48 gramos son ácidos grasos esenciales poliinsaturados. Estos ácidos tienen un alto valor biológico y son componentes fundamentales de la leche materna.
• Son fuente de proteínas: proporcionan proteínas que son vitales para el crecimiento y la reparación de los tejidos tanto de la madre como del feto.
• Contienen folfatos: el folato presente en las nueces es indispensable durante el embarazo, ya que ayuda a prevenir defectos neurológicos en el bebé.
• Aporta vitaminas y minerales esenciales: estos frutos secos son una fuente concentrada de vitaminas del complejo B, especialmente B6, así como de vitamina E, magnesio, fósforo, y zinc. Todos estos nutrientes son esenciales para un embarazo saludable.
• Ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga: además de su papel en la neurotransmisión y en el desarrollo de la retina, estos ácidos grasos son necesarios para mantener la estructura y la función normales del cuerpo.
• Propiedades antioxidantes: las nueces contienen antioxidantes que protegen las células del daño oxidativo y fortalecen el sistema inmunológico.
• Alto contenido en fibra: la fibra en las nueces favorece el tránsito intestinal, ayudando a prevenir el estreñimiento, un problema común durante el embarazo.
• Ayuda a reducir el riesgo de preeclampsia: numerosos estudios indican que consumir nueces regularmente puede contribuir a reducir el riesgo de preeclampsia, una complicación grave del embarazo. En este artículo encontrarás una Dieta para embarazadas con preeclampsia.
• Mejora el desarrollo cognitivo del niño: el consumo de frutos secos durante el embarazo está asociado con un mejor desarrollo cognitivo en el niño.

Qué pasa si como nueces en el embarazo

Siempre que no existan contraindicaciones y se consuman con moderación, las nueces se consideran un alimento muy recomendable para incluir en la dieta de las embarazadas y lactantes. Sin embargo, es importante tener en cuenta algunos aspectos:

• Alergias: si tienes antecedentes de alergia a las nueces, evita comerlas.
• Calorías: por su alto contenido calórico, si las comes en exceso aportarás más calorías en tu dieta.
• Trastornos del sistema digestivo: para algunas personas, comer demasiadas nueces puede causar indigestión, gases e incluso diarrea.

Para aprovechar al máximo los beneficios de las nueces durante el embarazo, te dejamos algunos consejos:

• Inclúyelas en tu dieta diaria: añade algunas semillas a tus aperitivos, ensaladas o yogures.
• Consume nueces naturales: las nueces naturales son la mejor opción, ya que conservan todas sus propiedades nutricionales. Puedes alternar entre diferentes tipos de frutos secos para obtener una mayor variedad de nutrientes, como almendras, avellanas o nueces de macadamia.
• Consúmelas con moderación: evita el consumo excesivo de nueces para mantener una dieta equilibrada.
• Consulta a tu médico si tienes dudas: si tienes alguna duda o preocupación, consulta a tu médico o nutricionista.

En definitiva, las nueces se consideran nutritivas y beneficiosas para las mujeres embarazadas, su consumo regular puede contribuir a un embarazo saludable y al desarrollo óptimo del bebé. Sin embargo, es importante consumirlo con moderación y como parte de una dieta equilibrada. Recuerda que cada embarazo es diferente, por lo que es necesario consultar a tu médico para obtener el asesoramiento adecuado.

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