Mi bebé llora como si estuviera asustado: por qué y qué hacer

Es normal que, en algunas ocasiones, los bebés lloren como si estuvieran asustados. El llanto es la principal forma de comunicación de los bebés en los primeros meses de vida y, aunque lloren con intensidad o de una forma diferente, esto suele ser resultado de problemas comunes que forman parte de su adaptación y desarrollo.

Ahora bien, este tipo de llanto intenso también puede desencadenarse por una crisis de llanto o berrinche, de ahí la importancia de saber distinguirlos. Las crisis de llanto son comunes en bebés más pequeños y los principales motivos que suelen desencadenarlas incluyen malestar, incomodidad o necesidad emocional.

Por su parte, los berrinches suelen ocurrir en niños mayores, a partir de los 18 meses, cuando comienzan a expresar su frustración o enojo por no obtener lo que desean. Durante un berrinche, el niño puede llorar, gritar, patalear o mostrar conductas desafiantes. Seguidamente, te mostramos algunos aspectos que pueden ayudarte a diferenciar los llantos y berrinches:

• Edad: si el bebé tiene menos de un año, es poco probable que se trate de un berrinche.
• Intensidad y duración del llanto: las crisis de llanto suelen ser más intensas y prolongadas que los berrinches.
• Detonado por una causa: los berrinches suelen tener una causa específica, por ejemplo, negarse a algo que el niño quiere. En cambio, las crisis de llanto pueden no tener una causa aparente.

En ocasiones, los bebés pueden mostrar manifestaciones de miedo o sobresalto a través de su comportamiento y lenguaje corporal. Algunos síntomas que pueden ayudarnos a identificar si el bebé está asustado son:

• Llanto repentino e intenso: un bebé que se siente asustado puede comenzar a llorar de forma abrupta, como si estuviera sorprendido.
• Movimientos bruscos: el bebé puede realizar movimientos reflejos, como el reflejo de Moro, que se presenta cuando el bebé extiende sus brazos y piernas de forma repentina.
• Cambios en la respiración: la respiración del bebé puede volverse más rápida o irregular.
• Agarre firme: si está asustado, es posible que se aferre a la madre o a la persona que lo sostiene con más fuerza de lo habitual.

También puede interesarte consultar Por qué mi bebé se asusta mucho mientras duerme y cómo evitarlo.

A continuación, te mostramos las razones principales por las que un bebé puede llorar como si estuviera asustado:

• Reflejos primitivos: durante los primeros meses de vida, los bebés tienen activos los reflejos primitivos, como el reflejo de Moro, mencionado anteriormente, que puede provocar que se sobresalten con facilidad al sentir que están cayendo, o bien al escuchar un ruido fuerte. Como consecuencia, es posible que el pequeño comience a llorar con intensidad.
• Ruido o luz intensa: la inmadurez del sistema nervioso central de los bebés los hace muy sensibles a estímulos como ruidos fuertes o luces brillantes. Al presenciarlos, es probable que tu bebé se asuste y se sobresalte, especialmente si estaba durmiendo.
• Sueños o pesadillas: aunque los bebés no tienen el mismo tipo de sueños que los adultos, pueden tener experiencias sensoriales o imágenes que les resulten incómodas o perturbadoras mientras duermen, lo que podría hacer que se despierten llorando de forma repentina y asustada. Aquí encontrarás información sobre Las fases del sueño del bebé y sus características.
• Separación de los padres: hacia los 9 meses, los bebés desarrollan la ansiedad por separación, que les genera miedo o inseguridad al separarse de su madre o su principal cuidador. En estos casos, estar lejos de la madre puede provocar ansiedad y llanto en los bebés, sobre todo si se trata de bebés más sensibles.
• Dolor o malestar físico: los cólicos, la dentición o un dolor provocado por inflamación o infección pueden provocar que el bebé llore con intensidad, de una forma muy similar a cómo lo haría si estuviera asustado.
• Sobrecarga sensorial: algunos bebés no están acostumbrados a la exposición constante de estímulos. Por esta razón, cuando se exponen de forma repentina a ruidos, luces o movimientos bruscos, pueden angustiarse y llorar como si estuvieran asustados para expresar su incomodidad y su necesidad de tranquilidad.
• Entornos nuevos: las situaciones o experiencias nuevas pueden llevar al bebé a sentirse inseguro y llorar como si estuviera asustado, especialmente cuando lo coge una persona extraña.

Si tu bebé llora de manera intensa como si estuviera asustado, puedes tratar de calmarlo siguiendo estas recomendaciones:

• Detecta cual puede ser la causa: observa el entorno donde se encuentra y busca alguna causa posible. Evalúa además si tiene dolor o algún malestar como gases o cólicos. De ser así, comunícate el especialista.
• Haz contacto físico, cárgalo y hazle caricias: hablarle con suavidad, mecerlo, darle palmaditas en la cuna y acariciarlo son las mejores maneras de tranquilizar al bebé. Muchos bebés lloran porque se sienten inseguros lejos de los brazos de mamá.
• Envuelve a tu bebé: en bebés menores de 3 meses, envolverlo con una manta puede ayudar a que se sienta seguro y contenido, como cuando se encontraba en el vientre materno. Asimismo, puede ser menos frecuente el reflejo moro.
• Crea un ambiente tranquilo: apaga las luces fuertes y directas de la habitación donde el bebé descansa y evita realizar ruidos fuertes.
• Aliméntalo: si tu bebé llora desconsoladamente, no hay que descartar que sea porque tiene hambre o sed. Alimentarlo puede ayudarte a descartar esta opción.
• Dale un baño relajante con agua tibia: esto ayuda a calmar a algunos bebés al instante, sin embargo, hace que otros lloren aún más.

Es normal que te sientas angustiada por no saber que le ocurre a tu bebé, sin embargo, debes tener en cuenta que es muy importante que mantengas la calma en este tipo de situaciones, ya que el bebé puede percibir que estás nerviosa y estresada. En consecuencia, esto podría provocar que se altere más y sea todavía más difícil calmarlo. Si quieres conocer más información sobre este tema puedes consultar el artículo Qué hacer cuando un bebé está asustado y llora mucho.

Los bebés lloran porque es la única manera que tienen de comunicar que tienen una necesidad no cubierta, como hambre, calor, frío, malestar, dolor, incomodidad, etc. Sin embargo, el llanto cede cuando se les atiende. Ahora bien, en algunas ocasiones no hay forma de calmarlo, por lo que el llanto del bebé puede resultar alarmante. Te mostramos las principales señales a continuación:

• El llanto es persistente y no hay forma de calmarlo.
• El llanto se acompaña de otros síntomas, como fiebre, dolor, diarrea, dificultad respiratoria o cambios en el color de la piel.
• El bebé no responde a los estímulos. Por ejemplo, se observa somnoliento o tiene una actitud diferente a la de costumbre.
• El bebé come y duerme poco.

En estos casos, es importante acudir al pediatra para realizar una valoración que pueda determinar la causa que está desencadenando el malestar y tratarla de una manera más objetiva. Como hemos podido ver, que el bebé llore como si estuviera asustado no acostumbra a ser un motivo de preocupación. Aunque son muchos los factores que pueden ocasionar, lo más habitual es que se deba a incomodidades físicas o miedo. Por ello, si llora asustado, es importante que identifiques qué podría estar causándolo y cubrir esa necesidad en específico.

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